Septiembre es un mes de inicio: de las clases, del trabajo, de la rutina…La vuelta a lo cotidiano suele afectar a todos los aspectos de nuestra vida, incluyendo al aspecto amoroso. Tras un verano de fiestas, viajes y desconexión no es de extrañar que muchas parejas se replanteen su relación. El haber estado separado durante las vacaciones puede ser motivo de distanciamiento entre ambos. Puede estar provocado porque ese tiempo nos lleva a pensar en lo que realmente queremos y si de verdad echamos de menos al otro o, directamente, porque alguno de los dos ha decidido que se está

Cuando se nos arrebata aquello que más nos importa o simplemente cuando tenemos angustia existencial del tipo que sea puede resultar agradable leer y conocer experiencias de otros para compartir esa ese especie de dolor o tristeza melancólica que inspira el blues. Todo tiene un principio y un final, podemos aplicar la famosa frase: “La energía ni se crea, ni se destruye, sólo se transforma”, para decir que no hay un final completo para todo y por mucho que se nos hiele el corazón, que perdamos el ánimo, el tiempo, con trabajos abusivos que nos hacen olvidar nuestra existencia. Debemos